El exfuncionario judicial estaba en prisión domiciliaria desde el 19 de abril último luego que  Godoy acreditó como probables las acusaciones sobre enriquecimiento ilícito, cohecho pasivo agravado en un caso de estafas, incumplimiento de deberes de funcionario público y revelación de información secreta.

En tanto, diez días después en sesión conjunta de Senadores y Diputados de Santa Fe se definió la destitución  de Blanco de su cargo de fiscal y se  lo inhabilitó para intentar concursar por el cargo por diez años.

Las acusaciones

Cabe recordar que el fiscal Leandro Mai pidió en primera instancia imputar a Blanco en nueve hechos solicitando prisión preventiva ordinaria entendiendo que las acusaciones permitían proyectar una pena superior a los ocho años en caso de existir condena y que había riesgo de entorpecimiento en la causa y riesgo de fuga por contar con dinero suficiente para irse del país. De todos, modos Godoy definió que solo había elementos para sostener la probabilidad de culpabilidad en cuatro de los hechos.

Así el magistrado dio por valida la acusación que observaba “inconsistencias” en “el aumento desproporcionado de bienes en poco tiempo en la función pública” de Blanco. Planteó que en cinco años adquirió un coche de alta gama y tres propiedades. Si bien en el medio aparece una donación de sus padres por 900 mil pesos, el juez fue muy coloquial al expresar que “lo ganado por derecha no alcanza para justificar los bienes”. Por eso dio como válida la acusación por enriquecimiento ilícito.

Godoy convalidó también la acusación por cohecho pasivo agravado por un episodio donde se acusa a Blanco de haber recibido una cifra cercana a los 500 mil pesos con el fin de morigerar una situación punitiva en una causa sobre estafas a jubilados realizadas por dos personas. Concretamente, en una semana el fiscal cambió su parecer, pasando de un pedido de condena de 12 años a un acuerdo abreviado de tres años de prisión condicional.

Además el juez aclaró determinó no había  elementos contundentes para vincular a Blanco con protección a narcotraficantes, como se desprendía en algunas de las acusaciones del fiscal Mai. No obstante, consideró que hubo un incumplimiento de deberes de funcionario público durante el secuestro de un utilitario vinculado a Nahuel Novelino (preso por tráfico de drogas) que no estuvo debidamente documentado ya que no existía ninguna prueba previa.

El otro hecho es el “innegable vínculo” que tenía Blanco con una persona acusada de comercializar estupefacientes, que era un informante del fiscal. En una relación de cierta reciprocidad, se acredita a través de escuchas que Blanco le revelaba información secreta.

Fuente: venado24.com.ar