Chiara Páez tenia 14 años cuando despareció el 9 de mayo de 2015 y fue asesinada por su novio Manuel Mansilla, de 16 años.
El viernes pasado se cumplieron cuatro años de la desaparición física, por lo que familiares y amigos rezaron por el eterno descanso en una misa realizada en Parroquia Virgen del Valle.
#Niunamenos
El 10 de mayo de 2015, fue encontrado el cuerpo de Chiara Páez una adolescente de 14 años en Rufino, en Santa Fe. Páez, que se encontraba embarazada en aquel momento, había sido asesinada por su novio. Este hecho movió a las organizadoras a realizar otra convocatoria, esta vez una concentración frente al Congreso, en el centro de la ciudad de Buenos Aires. La convocatoria tuvo la adhesión de numerosos grupos feministas y organizaciones sociales, fue difundida en redes sociales, revistas femeninas y en los diarios más importantes del país, y fue apoyada por todo tipo de personas indistintamente de su género. Al principio se trataba de un movimiento local, pero el tema rápidamente se viralizó por las redes sociales y tomó trascendencia internacional. Numerosas figuras públicas adhirieron, incluyendo jugadores de fútbol, actores, artistas, periodistas, deportistas, dirigentes políticos, ONG, y sindicatos.
Primer marcha #NiUnaMenos en Buenos Aires. La marcha tuvo lugar el 3 de junio de 2015 teniendo como principal punto de encuentro la Plaza del Congreso en Buenos Aires y repercutió en varias ciudades de Argentina. A la misma asistieron más de 300.000 personas apoyadas por grupos de derechos de las mujeres, sindicatos, organizaciones políticas y sociales.
Condena de su asesino
El 8 de septiembre de 2017 Manuel Mansilla fue condenado a 21 años de cárcel. El juez de menores Javier Prado sostuvo en su fallo que “Mansilla mató a Páez despreciando su condición de mujer y conociendo su embarazo”. La autopsia reveló que tenía restos de un fármaco antiabortivo en sangre. Prado dio por probado que Chiara murió por la paliza que le propinó su novio “en un contexto de violencia de género” y destacó la falta de arrepentimiento del adolescente.