De cara a la controversia generada entre el gobierno nacional y el de Bolivia por la atención de los migrantes en los hospitales públicos, Ramiro Huber, referente del Círculo Médico del departamento General López, difundió un comunicado titulado Salud sin Fronteras, donde rebate algunos de los argumentos esgrimidos para limitar la atención de ciudadanos extranjeros y avanza en conceptos sobre un enfoque más amplio de la problemática de salud.
“Hoy es entre boliviano y argentinos, pero si se impone esta mirada, más tarde o temprano, se puede reproducir entre las provincias o entre los municipios”, explica.
“La controversia reciente producida entre el gobierno boliviano y el actual gobierno argentino, reducida a la firma de un “convenio de reciprocidad”, limita la mirada tan sólo a una estimación de gastos médicos generados por migrantes a ambos lados de la frontera, y pretende establecer una suerte de clearing (intercambio de gastos) entre ambos países. Este enfoque reduce el análisis de un tema que es mucho más complejo, y la falta de acuerdo entre los países incomoda, divide, separa y discrimina”, avanza el texto.
Y agrega que es necesario remarcar la importancia de “administrar presupuestos de salud que suelen ser insuficientes frente a expectativas y demandas sociales crecientes” pero que, a su vez, es sustancial concebirlos como “son un espacio social, cultural, económico y político de integración, de confluencia, de desarrollo humano, de intercambios, de convivencia y de crecimiento”. Por lo cual, afirma que los Estados deben asegurar a todos –nativos e inmigrantes- el derecho universal a la salud.
“Esto incluye la posibilidad de planificar y programar acciones conjuntas para la promoción de la salud y la prevención de enfermedades. Estaremos entonces logrando un objetivo superador y altruista: una salud sin fronteras, integral y para todos”, finaliza.