Para hacerlo bien, en todo momento hay que estar atento a los detalles. En toda estrategia de email marketing, todo comienza por la suscripción que realizan los usuarios a un boletín, a una lista de suscriptores o a un newsletter. En ese caso, apenas se dan de alta, estarán conscientes de lo que han hecho y su interés por lo que acaban de hacer será pleno: ¿por qué no aprovechar ese interés e intentar explotarlo desde el principio con un buen email de presentación?
¿Qué es el email de presentación?
Dentro del email marketing, los usuarios pueden suscribirse a una lista de correo de su negocio por distintas vías o razones. Por darse de alta explícitamente, por haber comprado productos o servicios y aceptar pertenecer a la lista; o bien, porque les ha saltado un pop-up en el que se pueden suscribir para recibir algo en concreto -una promoción, un libro gratuito, etcétera-.
Luego de eso, tendrán que confirmar su suscripción mediante el correo de validación, el cual se envía automáticamente producto del doble opt-in. Pero luego, se debería enviar un email de presentación.
Y el email de presentación puede ser más que un mensaje de bienvenida frío y sin contexto, sino que puede ser una de las mejores herramientas del email marketing para terminar de ganar el interés pleno de los usuarios, e incluso para generar las primeras ventas a través de la lista de suscriptores, lo cual no estaría nada mal.
¿Cómo hacer que el email de presentación sea efectivo?
El email de presentación, por supuesto, tiene como finalidad obvia dar a conocer a la empresa, a su producto, servicio, a lo que mejor saben hacer. También, sirve para dar la bienvenida al nuevo suscriptor, guiándole de forma breve por todo lo que encontrará allí. Suele, al final, dejarse un agradecimiento por formar parte.
Sin embargo, no siempre tiene que ser así. O mejor dicho, puede ser una herramienta mucho más contundente para la conversión y las ventas, sin dejar de ser un mensaje de presentación. Aquí, algunos consejos para lograrlo:
¿Por qué se han suscrito?
En principio, se debe identificar la razón por la que se ha suscrito un nuevo usuario.
- Pudo haber sido porque le ha gustado el contenido del blog y se ha dado de alta para no perderse ninguno de ellos.
- Pudo haber sido porque le ha saltado un aviso de que hay un producto que puede solucionar una necesidad que tiene.
- Es un cliente y al comprar se le ha dado la posibilidad de pertenecer a la lista de suscriptores.
Identificar por qué se ha suscrito -lo cual es muy fácil implementando las herramientas adecuadas- servirá para plantear diferentes variantes del correo de bienvenida o del email de presentación, ya que en algunos casos se podrá ser más directo con las intenciones de venta, mientras que en alguno solo se tendrá que hacer una cordial bienvenida y posteriormente, en próximas escalas, intentar correos más persuasivos.
Asunto interesante
El asunto de un correo es, para el contenido web, el título de un artículo. Por ende, su importancia es máxima para captar la atención de los usuarios.
De nuevo, dependiendo de la finalidad de esa bienvenida, se podría apostar por distintos tonos y matices. Lo ideal es siempre hacerlo interesante, enfocarlo a la solución de un problema o a la identificación de una necesidad -para ello hay que conocer bien el mercado-, porque eso hará que los usuarios quieran abrir y leer el correo.
Sencillo y concreto
Al grano. Un correo de bienvenida no debe tomar más de 3 párrafos, y ninguno de ellos debe ser muy denso. Al final, se está haciendo un email de presentación, más no se está enviando una propuesta de negocios.
Sin importar la razón de la suscripción, mientras más sencillez se pueda aportar al texto -sin que eso reste calidad y contundencia- mayores serán las posibilidades de que el usuario se tome a bien el mensaje, o responda eficazmente al CTA final, si lo hubiera.
Vender, si es posible
Cuando los usuarios se dan de alta en una lista de suscriptores producto de pinchar en un aviso específico, como por ejemplo, suscribirse y descargar gratis 10 consejos para aliviar tal necesidad, lo ideal es aprovechar ese email de presentación no solo para dar lo ofrecido, sino también para vender la solución de pago de esa empresa.
Es un método bastante utilizado -y bastante rentable- que utilizan muchos negocios, porque las personas al fin de cuentas sí obtienen lo que estaban buscando al momento de suscribirse, pero al mismo tiempo conocen de primera mano todos los beneficios de apostar por un producto o servicio que sí puede satisfacer de forma tajante su necesidad. Si bien no es una práctica muy común, utilizar el email de presentación como una herramienta de venta puede estar bien visto, sobre todo si el usuario ya sabe que se ha suscrito buscando una solución puntual para un problema específico.
Presentar el negocio y lo que puede ofrecer
Aparte de dar la bienvenida, el email de presentación también puede ser la mejor manera de hacer un tour virtual privado a cada uno de los suscriptores.
De esa manera, el email de presentación pudiera no intentar vender directamente, pero sí ofrecer información breve sobre qué encontrará, por qué es bueno que se haya suscrito, qué recibirá en próximos envíos de la lista de suscriptores, qué otros recursos -similares al que ha recibido por suscribirse- puede encontrar en la web, y así una serie de variantes y posibilidades. Lo ideal, en todo caso, es no utilizar emails de bienvenida genéricos, fríos, sin ningún tipo de contexto ni enfoque. Por el contrario, una simple personalización del email de presentación puede hacer que los resultados, en términos de apertura, lectura y clics, se disparen.