En muchas ocasiones hemos visto niños o niñas que tenían el cabello rubio y cuando crecen se les va oscureciendo, incluso hasta en algunos casos se convierte en negro. ¿Por qué ocurre esto? La respuesta está en la genética y en el proceso del crecimiento del pelo.
Antes de explicar las razones por las cuales el cabello se oscurece, es importante señalar que el pelo es una estructura viva, es decir, tiene vida igual que el resto de los órganos de nuestro cuerpo. Crece y cambia, no solo por cuestiones genéticas, sino también por la influencia del medio al que tiene que adaptarse y con el paso del tiempo envejece, y en consecuencia aparecen las canas.
Además de los factores ambientales y el paso de los años, existen otros factores que determinan el cambio del color de pelo y ellos son los melanocitos. Células que se encargan de producir un pigmento que se llama melanina que determina el tono del cabello.
Asimismo, existen dos tipos de melanina: la eumelanina y la feomelanina. La primera es la que abunda en los cabellos castaños y negros, y la segunda es la que hace que el pelo sea rubio, platinado o pelirrojo.
La herencia genética será la que decidirá el color de pelo. Aunque en el caso de los y las bebés, sus melanocitos están todavía en desarrollo, y por eso su pelo es más claro que el de los adultos.
Con el paso del tiempo, aumenta el nivel de melanina de la persona y se empieza a definir el color de cabello. Si existe más feomelanina, el color de pelo será rubio, por el contrario si posee eumelanina -lo que suele ser más común-, será castaño o moreno.
Teniendo conocimiento sobre cómo los genes determinan el color del cabello de una persona, se reflexiona acerca de la importancia de explorar y utilizar los avances en genética para autoconocernos. En la actualidad, es posible descubrir la información que se encuentra almacenada en el ADN y utilizarla en beneficio propio mediante el uso de análisis genéticos.
En este sentido, Genera, el primer laboratorio de Latinoamérica especializado en genómica personal, ofrece los Test de Ancestralidad, Salud y Bienestar que permite a cada persona, entre otras cosas, saber si se cuenta con predisposición a desarrollar calvicie, conocer el camino recorrido por su linaje paterno y materno, encontrar personas que compartan su misma secuencia de ADN, analizar cómo su cuerpo absorbe e interactúa con determinados nutrientes y vitaminas, así como la eficacia de algunas dietas, su reacción a determinados medicamentos, el riesgo de desarrollar enfermedades, algunas características de su piel, entre otros.