Newell’s se distrajo sobre el final del partido y perdió con Arsenal por 3 a 2

A los 43 minutos del complemento Emilio Zelaya mandó un zapatazo a la red. En el primer tiempo, Mariano Echeverría en dos ocasiones había puesto en ventaja a los locales. El rufinense Muñoz y Bernardi, los goles de la Lepra.

En un partido electrizante y de ida y vuelta, Newell’s dejó pasar una inmejorable oportunidad para sumar de visitante y cayó por 3 a 2 ante Arsenal en Sarandí. El local lo sorprendió con dos goles tempraneros, pero la Lepra se recuperó y empató gracias a los goles de Muñoz y Bernardi. Cachi Zelaya, a 7 minutos del final, puso cifras definitivas.

Dos goles tempraneros. Ambos productos de tiros de esquina desde la derecha fueron los que le permitieron a Arsenal cerrar el primer tiempo con una victoria parcial por 2 a 1 sobre Newell’s en Sarandí. El descuento llegó de la mano de Fabián Muñoz.

Es que Newell’s se vio sorprendido de entrada. Impreciso y con el control del balón en manos del local, el conjunto de Ricardo Lunari no le encontraba la vuelta a un partido que desde el vamos arrancó perdiendo. Tanto fue así que al minuto de juego, el equipo de Martín Palermo tuvo a su favor un tiro de esquina desde la derecha. La ejecución fue al segundo palo de Nahuel Guzmán, el zaguero Mariano Echeverría logró capturar el balón y mandó la pelota a la red.

La defensa leprosa mostró desde el comienzo graves problemas para contener el embate de la delantera de Arsenal, que una y otra vez llegaba con peligro al arco del Patón Guzmán. A los 6 minutos el local tuvo un nuevo córner a su favor. Y otra vez el defensor Mariano Echeverría —esta vez desde en la zona del punto del penal— conectó un zapatazo fuerte y arriba y marcó el segundo.

Rolle a los 16 estuvo a punto de meter el tercero tras un centro cruzado desde la izquierda. La primera parte del partido se mostraba claramente a favor del local, mientras el rojinegro no conseguía detener el constante ataque de los de Sarandí.

Pero se sabía que con la pelota al piso Newell’s podía recuperarse. Lentamente fue tejiendo en el mediocampo la dinámica que mejor sabe hacer: rotar la pelota, abrir el juego hacia los costados y, cuando se puede, verticalizar hacia el arco de enfrente.

Estas premisas fueron las que le permitieron a los 20 minutos que Ever Banega habilitara con un pase exquisito a Fabián Muñoz, que logró meterse entre dos defensores rivales. El delantero se escapó por la izquierda y tocó suave para colocar la pelota al lado del palo derecho de Limia, que nada pudo hacer para evitar la caída de su valla.

A partir de ahí, Newell’s pareció recuperar la memoria y, con el juego generado por Banega y la movilidad de Muñoz en la línea de ataque, comenzó emparejar el trámite del partido. Arsenal dejó de monopolizar el balón y el encuentro se hizo de ida y vuelta.

El rojinegro estuvo cerquita del empate a los 33 cuando el juvenil Ponce conectó un centro llovido desde la derecha. El arquero de Arsenal contuvo en la línea. Una similar tuvo el local cuando el Patón Guzmán tapó de forma espectacular un cabezazo que se metía en su arco.

En el segundo tiempo, nuevamente los primeros minutos fueron para el local. El ex canalla Emilio Zelaya dejó pasar dos ocasiones claras de gol. Parecía que no era su noche, aunque sobre el final iba a tener su revancha.

Cuando el reloj del partido marcó los 22 minutos del complemento, el chico Ponce se escapó por la izquierda y se metió al área. Un defensor local lo tocó abajo y Maglio cobró penal. Desde los doce pasos y con un disparo fuerte y arriba, Lucas Bernardi puso el 2 a 2.

Newell’s crecía y creía en su juego. Parecía que se llevaba de Sarandí un punto más que valioso. Pero una vez más la distracción en la defensa le jugó una mala pasada cuando a los 42 minutos Emilio Zelaya encontró una pelota en el área de Guzmán y disparó fuerte contra la red, para poner cifras definitivas al marcador.

Así, Newell’s dejó escapar una chance de sumar un punto de visitante y se retiró con las manos vacías de la tarde-noche de Sarandí.

Fuente: La Capital – Rosario