Es la conclusión de un relevamiento realizado por una universidad.
Entre seguro, patente, combustible, verificación técnica, peajes y estacionamientos, mantener un vehículo en Argentina es un 55% más caro que hace un año, reveló un estudio de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV).
En términos porcentuales la mayor disparada de precios es en peajes, rubro que aumentó un 81,8%, seguido por los combustibles, que subieron un 78% y la Verificación Técnica Vehicular (VTV), que lo hizo en un 42,8%.
Otros aumentos fueron para los seguros, cuyos valores crecieron un 34%, el estacionamiento que lo hizo en un 33,3% y la patente, un 33,2%. Además, los lavaderos duplicaron su precio: de $160 trepó a $320.
Según el trabajo de la UNDAV, publicado por Ámbito Financiero, dentro de la canasta familiar el peso de mantener un auto aumentó entre el 20% y 22%. «La disparada del dólar impactó de lleno en los rubros que más pesan a la hora costear el uso de un auto», señaló el informe.
Sobre el aumento en los combustibles, destaca que el precio de las naftas se incrementó entre un 30 y un 35% en 2018. Así, cargar un tanque promedio de 55 litros cuesta entre $1.800 y $2.200.
Según cálculos de TN Autos, por ejemplo, ir y volver desde ciudad de Buenos Aires a Mar del Plata (800 km) ya implica un gasto solo de combustible de $1.900 en un auto naftero (nafta súper), $1.500 en uno diésel (gasoil premium) y $960 si es a GNC.
A todo esto se suma el aumento general en el precio de los cero kilómetros. Según el trabajo de la UNDAV, en los primeros 8 meses del año aumentaron más del 33%. Cabe aclarar que en el cálculo no entraron los valores de septiembre, que en algunas marcas fue de más del 20%.
Además, descuentos especiales al margen, ya no quedan autos con por menos de $360.000 y hay solo tres autos producidos en Argentina por menos de medio millón de pesos.