PORTO ALEGRE (Enviado especial) — La Selección Argentina llevó a cabo su primer entrenamiento en Porto Alegre, de cara al trascendental partido del próximo domingo ante Qatar, que definirá su futuro en la Copa América de Brasil.
Lionel Scaloni contó con plantel completo en la práctica de Beira-Río. Prensa AFA
En el imponente estadio Beiro-Río del Inter de Andrés D’Alessandro, Lionel Scaloni tuvo a los 23 futbolistas a disposición. Lautaro Martínez, quien el jueves llevó a cabo tareas de fisioterapia por un traumatismo en la región glútea izquierda, trabajó con normalidad junto a sus compañeros.
En los 15 minutos abiertos a la prensa solo pudo verse la entrada en calor y toques de pelota entre los jugadores. Lionel Messi y Sergio Agüero, inseparables como siempre. Mientras tanto, los arqueros realizaron labores específicas junto a Martín Tocalli.
Scaloni, hábil en los jueguitos y errático con un par de remates de larga distancia, repartió pecheras justo cuando los periodistas comenzaban a desalojar la zona. A priori, una jugada estratégica para confundir. Aunque varios titulares compartían pechera amarilla, los 11 que saldrán a jugar en el Arena Gremio son un misterio.
Lo que sí es prácticamente un hecho es que la Albiceleste formará con Messi y dos puntas (probablemente Agüero y Lautaro), tal como reclama gran parte de los hinchas y también varios jugadores puertas adentro. Lo que queda por confirmarse es de qué manera se conformará el mediocampo para conseguir el tan ansiado equilibrio.
La Selección llegó a una situación límite, tal como describió el capitán. La necesidad de obtener una victoria y el flojo nivel mostrado hasta el momento inclinan la balanza por una formación un poco más arriesgada.