WASHINGTON, EU, abr. 18, 2014.- La Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio (NASA) desarrolla una especie de platillo volador que permitirá enviar a Marte objetos grandes e incluso expediciones humanas.
La NASA anunció que los ensayos con la nueva tecnología están previstos para comenzar en junio próximo, y si todo avanza según lo planeado se podrá aplicar a partir del año 2018.
La NASA señala que uno de los mayores problemas de los viajes a Marte es el aterrizaje, pues la atmósfera es mucho más enrarecida que la terrestre y eso hace diferente el descenso, que sucede con mayor rapidez.
Hasta la fecha, las sondas espaciales utilizan paracaídas diseñados en la década de 1970 para descender en Marte, y aunque han funcionado bien, los objetos que la NASA envía al planeta rojo son cada vez más grandes y pesados, de acuerdo con el documento.
Cuanto más grande es el objeto, con más velocidad cae, y para que las naves del futuro sobrevivan al aterrizaje hay que inventar una nueva tecnología, pues ya incluso existen planes de expediciones humanas.
La velocidad de descenso de objetos grandes y pesados sería demasiado alta para que funcione el paracaídas, y para resolver el problema los científicos decidieron instalar un desacelerador en el módulo de aterrizaje, que durante la caída se infla.
Esa medida creará resistencia y frenará la caída hasta una velocidad en la que sea seguro activar el paracaídas.
El paracaídas usado en el nuevo sistema es tan grande que no cabrá en los túneles de viento que la NASA suele usar para los ensayos, por tanto, la nueva tecnología se probará al aire libre.
Las maniobras se realizarán en Hawái, donde se crearán condiciones parecidas al aterrizaje con la velocidad supersónica de la atmósfera marciana.
Fuente: noticieros.televisa.com