La Agencia de Seguridad Vial brindó recomendaciones ante la llegada de las vacaciones de invierno

Esta época del año presenta características especiales que tornan riesgosa la conducción por las rutas, y ante la cual es preciso incrementar la prudencia y la preparación.

La Agencia Provincial de Seguridad Vial (Apsv) brindó recomendaciones ante la llegada de las vacaciones de invierno, puesto que el invierno es la temporada del año que más riesgos presenta para la conducción. Esto exige mayor prudencia y preparación, tanto del vehículo como del propio conductor.

El período de luz se acorta, la niebla disminuye drásticamente la visibilidad, las lluvias y tormentas eléctricas son frecuentes, puede existir escarcha o hielo en la calzada. El riesgo aumenta aún más durante el receso escolar de invierno y otro feriados ya que se incrementa la circulación de vehículos en las rutas.

>>Ausencia de luz natural

En invierno, el “período de luz” se acorta notablemente. Esta falta de claridad puede provocar fatiga y sueño. El uso de los sistemas de iluminación es fundamental para obtener la visibilidad necesaria.

>>Niebla

La niebla es uno de los fenómenos meteorológicos más complicados a la hora de conducir y es frecuente que se produzca en esta época del año en nuestra provincia. Cuando se ingresa a un banco de niebla, la visibilidad disminuye drásticamente y la percepción visual tarda un tiempo extra en percibir peligros. En estos casos, es fundamental disminuir la velocidad, aumentar la distancia entre vehículos, no utilizar luces altas ni balizas y detenerse sólo en lugares seguros, no en banquinas.

>>Lluvia

La lluvia es otra de las condiciones meteorológicas que pueden ocasionar inconvenientes en la circulación. Debido a las características geográficas de la jurisdicción, numerosas rutas están atravesadas por arroyos que pueden inundarse y ocupar la calzada provocando anegamientos. En esos casos, es fundamental mantenerse informados para evitar los tramos inundados.

El viento es otro factor que puede comprometer la estabilidad del vehículo. En caso de fuertes vientos, se debe conducir más lento, a una velocidad que permita dominar el vehículo y utilizar una marcha más corta para tener mayor respuesta del motor.

>>Antes de salir

Para reducir las posibilidades de sufrir inconvenientes durante el viaje, se deben prever algunas medidas de precaución. Es imprescindible revisar la situación general del vehículo y consultar el estado del tránsito y del tiempo antes de salir, cuestiones que ayudan a elegir el itinerario más seguro.