Se trata de Grupo Independencia, que realizó una cruda descripción del agro tras cuatro años de problemas climáticos, básicamente por sequía. Grupo Independencia fue una de las agrupaciones organizadoras de la fuerte participación que tuvo el tractorazo del 23 de abril de 2022 en Plaza de Mayo.
“Desde Grupo Independencia, queremos hacer llegar nuestra profunda preocupación por la situación que atraviesa el sector agropecuario en Argentina. Las adversidades climáticas de los últimos cuatro años han afectado severamente nuestras cosechas, resultando en bajos rendimientos y altos costos que comprometen la rentabilidad y la continuidad de nuestras actividades. Ante este escenario, solicitamos al Gobierno la implementación de medidas urgentes que puedan aliviar la presión sobre los productores”, dijeron.
En esa línea, solicitaron la “eliminación de las retenciones”. Remarcaron que es “un impuesto que afecta directamente la competitividad de nuestras exportaciones y limita la capacidad de reinversión en el sector”.
También reclamaron el fin del impuesto PAIS, que no obstante finalizará como ya lo ratificó el gobierno nacional a fin de año. “Este gravamen encarece insumos fundamentales, incrementando los costos productivos en un contexto ya desfavorable”, dijeron.
Grupo Independencia, además, solicitó un “tipo de cambio único”. Explicaron: “Para asegurar previsibilidad y equidad en nuestras transacciones comerciales, permitiendo que el campo se desenvuelva en condiciones más justas”.
En este marco, indicaron: “Apelamos a que se cumplan las promesas realizadas durante la campaña electoral, especialmente aquellas orientadas a favorecer la producción y las economías regionales. El campo argentino es un motor clave para la economía del país, y estamos convencidos de que con el apoyo adecuado, podemos contribuir de manera significativa al crecimiento y desarrollo de la nación”.
El viernes pasado, en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Luis Caputo, ministro de Economía, se refirió a las retenciones tanto en su discurso como en una chala posterior con Javier Cervio, director ejecutivo de la entidad.
Cervio, en rigor, lo consultó sobre la “hoja de ruta” a la cual en el sector deberían estar “atentos” para el proceso de las retenciones. Y Caputo, pese a que en el sector agropecuario vienen insistiendo en la necesidad de un cronograma, no dio una precisión al respecto, ya sea de un tiempo específico, más allá de insistir en la cuestión del superávit fiscal “sostenido”.
“Como siempre decimos, está en el top uno de esos impuestos terribles que hay que sacar, retenciones, impuesto al cheque, ingresos brutos. La prioridad: nosotros hemos venido a bajar la inflación e impuestos”, señaló el ministro de Economía tras la pregunta. Y amplió: “Cuando antes nos convenzamos todos de que este país arranca, antes vamos a tener superávit sostenido, y cuando eso pase inmediatamente vamos a ir bajando estos impuestos”.
Antes de la charla con Cervio, Caputo en su disertación explicó que la baja de impuestos vendrá cuando haya un “superávit fiscal sostenido”. Señaló: “Nada nos gustaría más que bajar impuestos inmediatamente, pero a la Argentina su pasado la condena. ¿Cuál es el problema de bajar impuestos ahora? Que la consecuencia inmediata es que recaudás menos. Empezamos a recaudar menos y lo vamos a tener que financiar. Todos se van a empezar a cuestionar, ¿van a empezar a emitir de vuelta?”
Insistió: “Primero vamos a lograr superávit fiscal sostenido. Con eso le vamos a devolver plata a la gente”. Añadió que no se busca en esta materia algo de corto plazo, sino que perdure en el tiempo. “Esa es la manera que tenemos que sacar las retenciones, el impuesto al cheque, ingresos brutos, eso genera competitividad”, dijo.
Fuente: Diario La Nación