En la Laver Cup, Roger Federer decidió ponerle fin a su carrera profesional. Muchos siguen sin creerlo y no caen, pero llegó el día en el que el suizo de 41 años colgó la raqueta y cerró su intachable viaje en el tenis.
Su Majestad culminó una carrera impresionante en la que alzó 103 títulos, 20 Grand Slams, fue campeón de Copa Davis, ganó la medalla de oro y de bronce en los Juegos Olímpicos, 6 ATP Finals y fue #1 del mundo durante 310 semanas.
Pero Federer no solo es uno de los mejores de la historia por su palmarés, sino por lo que es tanto dentro como fuera de la cancha. Un ejemplo a seguir no solo para cualquier deportista, sino para toda la gente.
FUENTE: settenis.com.ar