CANCÚN (AFP).- La policía mexicana encontró hoy cinco cadáveres dentro de un auto abandonado, con reporte de robo, en una zona habitacional del balneario de Cancún, uno de los más turísticos del país, informó la fiscalía regional.
Un operativo de las fuerzas de seguridad en Cancún Fuente: EFE
Dos de esos cuerpos estaban en la parte de los asientos del auto, mientras que los otros tres estaban en el baúl. La policía informó que las personas estaban maniatadas y con signos de tortura.
«Los cuerpos de los cinco hombres están en calidad de desconocidos. La autoridad ministerial se encuentra recabando datos», apuntó la fiscalía en un comunicado, en el que no dio más detalles.
El hallazgo se produce en momentos en que el país está conmocionado por el caso de los tres estudiantes mexicanos que fueron asesinados y sus cuerpos disueltos en ácido, luego de que un grupo de narcotraficantes los secuestraron el mes pasado en el estado de Jalisco tras confundirlos con miembros de un grupo rival. Además, el país está en plena campaña electoral para los comicios generales del 1° de julio, que ha quedado marcada por los crecientes asesinatos de políticos.
A principios de enero, más de 5000 efectivos de seguridad fueron desplegados en varios puntos violentos de México, entre ellos Cancún, donde se ha registrado un repunte de la violencia criminal.
Ayer, la fiscalía de Quintana Roo, estado al que pertenece Cancún, reportó la detención de tres policías locales y otras dos personas acusadas del secuestro de cuatro colombianos de los que aún no se sabe su paradero. Los efectivos «presuntamente se encuentran ligados» a un grupo criminal, apuntó la fiscalía.
Además de Cancún, la violencia derivada del narcotráfico llegó a otros destinos turísticos importantes del país, como Los Cabos, en Baja California Sur.
En el primer trimestre de este año México sufrió un aumento en los homicidios del 15%, en medio de una escalada tras la ofensiva lanzada hace 11 años por el gobierno contra las bandas criminales, con el apoyo de las fuerzas armadas.
El Sistema Nacional de Seguridad Pública publicó los resultados de enero a marzo en los cuales aparecen 19 de los 32 estados del país con un repunte en los asesinatos.
A la luz de estas cifras, los analistas creen que la actual gestión del presidente Enrique Peña Nieto superará en muertes por violencia la de su antecesor, Felipe Calderón (2006-2012).
Los asesinatos saltaron de 3654 en el primer trimestre de 2015, uno de los años más bajos desde que arrancó la guerra contra las bandas en 2007, a 4363 en el de 2016, 5673 en el de 2017 y 6553 en el de 2018, lo que hace prever que finalice el año con más de 26.000 homicidios dolosos.
La cifra última equivale a 25 muertes por cada 100.000 habitantes y se traduce en 85 asesinatos cada 24 horas.