En ese contexto, le enviamos un escrito a Santiago Cafiero firmado por el Presidente Julio Alonso y por el Tesorero Juan Carlos Basílico en el cual expresamos la “tremenda preocupación que tienen los asociados de la institución, ante la dificultad de afrontar los costos en pandemia”.
Con el apoyo explícito del secretario General de la CGT, Carlos Acuña, solicitamos que el gobierno implemente sin demoras una asistencia económica a las Pymes del sector.
El pedido se resume en algún tipo de auxilio económico o financiero que permita a los estacioneros sobrellevar la grave situación que enfrentan, sea bajo la forma de alguna modalidad de deducción sobre los aportes y contribuciones de la seguridad social, o el diferimiento de su pago.
También sugerimos, en su defecto, que se pueda optar por un tipo de auxilio directo que permita afrontar el pago de haberes, “ante la imposibilidad de recurrir a los remedios ordinarios previstos para tales contingencias previstos en la Ley de Contratos de Trabajo, como lo son los despidos y suspensiones” que actualmente prohíbe el decreto presidencial.
Agregan que “sin perjuicio de que dichas medidas resulten necesarias y oportunas, nos preocupamos por transmitir a usted la preocupación de los propietarios de Estaciones de Servicio quienes ven drásticamente restringidos los ingresos de sus establecimientos”,
Al respecto, Basílico afirmó “que la restricción de la circulación pone en riesgo la continuidad de nuestros negocios, los que tienen costos fijos de operación que se tornan inconciliables, ante el derrumbe del despacho de combustibles de uso automotor”.
Fuente: Surtidores