A 101 años de su invención. El buscador recuerda en su página principal la creación de una de las más importantes señales de tráfico. Henry Ford y el auge del automovilismo, entre las causas de su implementación.
Como suele acostumbrar a los internautas, Google celebra hoy con un doodle el aniversario de la instalación de primer semáforo eléctrico del mundo, que se dio el 5 de agosto de 1914 en Cleveland, Estados Unidos.
Una de las causas que llevaron a implementar esta importante señal vial fue el crecimiento del tráfico urbano, que brotó considerablemente en Estados Unidos después de que Henry Ford lanzó el modelo «T» en 1908 y que comenzó a producir en masa a partir de 1913. El bajo precio de los vehículos y la confianza que generó el producto en la sociedad de ese entonces, fueron los motivos que empujaron su exitosa comercialización.
A diferencia del semáforo actual, Google utiliza en su doodle uno de dos colores: rojo y verde. Allí, se aprecia en la imagen animada que el artefacto vial intenta ordenar el trasitar de seis autos de la década del 20 -del siglo pasado- que van y vienen en ambos sentidos de una calle, donde cada uno lleva una de las letras que forma el nombre del buscador.
El semáforo, que se puso en marcha ocho días después de que en Europa estallase la Primera Guerra Mundial, fue creado por Garret Augustus Morgan y es considerado el primer semáforo moderno de la historia. Contaba con luces rojas y verdes sobre soportes con forma de brazo y un emisor de zumbidos, un sistema que se fue perfeccionando con el paso de los años, incluyendo distintos cambios, como la incorporación de una tercera luz amarilla.
Sin embargo, el primer semáforo de la historia, creación del ingeniero ferroviario John Peake Knight, se instaló en Londres en 1868. El aparato, que era manual y fue ideado en las señales del ferrocarril, tenía dos lámparas de gas de colores rojo y verde.
Este primer intento de regular el tráfico no fue muy práctico porque requería la presencia de una persona que lo haga funcionar. De todas formas, el paso al olvido de esta creación londinense llegó dos meses después de su instalación cuando el semáforo explotó causando la muerte de un policía que se encargaba de manejarlo.
Siete años después del primer semáforo eléctrico, llegaron los de tres luces. Estos fueron instalados en 1920 en Detroit y Nueva York.
Con el tiempo, los semáforos fueron perfeccionándose, hasta lo que hoy se conoce. En 1936 Charles Marshall se encargó de incorporar una señal rotatoria que indicaba el tiempo que restaba para el cambio de estado y en 1961 se instaló un dispositivo lumínico que regulaba el paso de los peatones.