Además, se creará YPF Litio, una sociedad independiente de la petrolera, para la intervención estatal en toda la cadena: desde la exploración hasta las baterías.
Ante la necesidad de bajar la brecha y acumular dólares, el Gobierno avanza con políticas sectoriales para flexibilizar el cepo. Luego del decreto para hidrocarburos, que le da a los exportadores libre acceso a una parte de las divisas, seguirán medidas en la misma línea para minería, economía del conocimiento y agro.
Minería es un sector que al Ministerio de Economía le interesa particularmente, por el potencial exportador y la importancia geopolítica de minerales como el litio. Por ese motivo, el Gobierno anunciará en el corto plazo la puesta en marcha de una empresa estatal minera, YPF Litio Sociedad Anónima, que buscará abarcar toda la cadena del litio, desde la exploración hasta las baterías.
Flexibilidad del cepo
El Ministerio de Economía, a cargo de Sergio Massa, y la Secretaría de Minería, que encabeza Fernanda Ávila, buscan por estas horas terminar de delinear el decreto que le dará a las empresas libre acceso al dólar por un porcentaje de sus exportaciones. Las empresas del sector tienen la expectativa de que el anuncio lo haga Massa en su primera gira por Estados Unidos que será la semana que viene, donde visitará gigantes mineros como Livent y Río Tinto.
El decreto está muy avanzado: el borrador plantea que las empresas podrán acceder libremente al dólar por entre 10 y el 25% de las exportaciones. A cambio, tendrán que cumplir distintos requisitos, que van desde la reinversión para extender la vida útil de los proyectos, hasta el agregado de valor, a través de la puesta en marcha de programas de desarrollo de proveedores locales.
La medida busca implementarse en diálogo con las empresas, nucleadas en la Cámara de Empresarios Mineros (Caem). Antes del anuncio, Economía quiere garantizar su funcionamiento. En el régimen de promoción de inversiones que sacó el ex ministro Martín Guzmán (decreto 234), que da beneficios a las empresas que inviertan más de u$s 100 millones, solo ingresó una minera. Otra de las medidas anunciadas fueron las retenciones móviles para el cobre, que las empresas pueden utilizar de forma optativa: solo una aseguró que lo haría.
El principal pedido empresario es el acceso a divisas, para pagar insumos y que no caiga la producción y por ende las exportaciones, también para el giro de dividendos, pero sobre todo para el repago de los créditos internacionales: una inversión en cobre como puede ser la de Josemaría en San Juan puede ascender a u$s 5.000 millones.
YPF Litio
El Gobierno anunciará en las próximas semanas la puesta en marcha de YPF Litio, una sociedad independiente, propiedad de YPF. “En un proceso de transición energética, y con un recurso tan importante a nivel geopolítico, es natural que el Estado invierta e intervenga en este mercado”, contó una fuente oficial a Ámbito. El objetivo de la compañía es abarcar toda la cadena del litio para avanzar en la “industrialización” del mineral.
La parte de la exploración y explotación es donde se dan los mayores problemas: el recurso es provincial, y los salares ya están en su mayoría concesionados a empresas privadas. Por eso, se buscará asociaciones con las empresas mineras provinciales para exploración del terreno. El primer paso fue la firma de un acuerdo entre YPF y Camyen (Catamarca Minera Sociedad del Estado) para exploración de litio en Fiambalá, en la frontera con Chile, para identificar el contenido del litio y las zonas de mayor riqueza.
“Si resolvemos esta parte, toda las demás etapas las tenemos encaminadas”, contó una fuente oficial. También la idea de YPF Litio será la de avanzar en una planta de carbonato de litio. La estrategia de desarrollo será en “asociación” con empresas privadas. Lo mismo con el financiamiento: una planta puede costar alrededor de u$s 400 millones. “El problema no pasa por el crédito, cuando tenés el mineral, aparecen los inversores”, contaron.
Finalmente, la idea de YPF Litio será contar con una planta de baterías. Será la que se inaugurará en diciembre en Berisso, provincia de Buenos Aires, en conjunto con Y-Tec, la unidad de negocios tecnológica de YPF. Dado que no hay un mercado de genéricos de litio, el objetivo será hacer foco en baterías específicas, en una primera etapa para el mercado interno, como puede ser para colectivos o motos.
Desde que se lance la empresa hasta que se pueda pensar en producir y exportar, el plazo es de al menos 5 años, estiman. Sin embargo, aseguran que el momento de comenzar a cerrar acuerdos es ahora. «La decisión política está», afirmaron. Además, analizan alianzas a nivel internacional, con los tres países que conforman el triángulo del litio, donde se concentra la mayor reserva mundial de litio. Buscan «aprovechar» la sintonía de los tres gobiernos de centro izquierda en Argentina, Chile, con Gabriel Boric y Bolivia, con Luis Arce. “¿Por qué no pensar en una Opep del litio?”, se preguntó una fuente oficial.
Fuente: Ámbito