Las Bolsas de Cereales y de Comercio del país expresaron públicamente su respaldo al Proyecto de Modernización Laboral presentado por el Poder Ejecutivo ante el Congreso de la Nación. Para las entidades, la propuesta constituye un paso “muy positivo y necesario” para fortalecer la competitividad y reactivar la economía argentina mediante un marco laboral actualizado y orientado a la creación de empleo formal.
En su análisis, remarcaron que las reformas planteadas permitirán reducir los elevados niveles de informalidad que aún persisten en el mercado laboral, y dotarán al sistema de reglas más claras y adaptadas a las dinámicas productivas actuales. Según las Bolsas, avanzar hacia un régimen laboral más flexible y moderno es esencial para mejorar la previsibilidad y atraer inversiones.
Uno de los puntos más valorados por el sector es la inclusión dentro del proyecto del Régimen de Incentivo para Medianas Inversiones (RIMI), una herramienta que —apuntan— puede marcar un antes y un después en la generación de nuevas oportunidades para el agro. Las entidades sostienen que el RIMI impulsará condiciones más favorables para canalizar capital hacia actividades vinculadas con la producción primaria, la incorporación de tecnología, la ampliación de la capacidad instalada y la innovación.
De acuerdo con el comunicado, este régimen no solo estimulará el crecimiento productivo, sino que también potenciará la creación de empleo, el agregado de valor y el desarrollo de cadenas agroindustriales más competitivas en el mercado interno y externo.
Con este respaldo, las Bolsas de Cereales buscan enviar un mensaje claro: promover reformas estructurales laborales y fiscales es, a su entender, un pilar fundamental para mejorar la productividad del país y para que el campo pueda seguir desempeñando su rol como motor de la economía argentina.
Fuente: Bolsa Cereales de Buenos Aires