Esperan tener las instalaciones disponibles para el 3 de febrero. Contará con 25 mil metros cuadrados y alojará a un millar de pacientes contagiados con la enfermedad.
hina inició este viernes la construcción de un hospital destinado a recibir a un millar de pacientes víctimas del coronarivus, a partir del 3 de febrero, informó la prensa estatal.
Según imágenes difundidas en la televisión, la maquinaria se ufanaba en preparar el terreno en que se erigirá el establecimiento en Wuhan, la ciudad donde se produjo el epicentro del brote, con 11 millones de habitantes y ubicada en el centro del país.
Los trabajos concluirán en tiempo récord, y el hospital, de 25.000 m2, abrirá sus puertas el 3 de febrero, según la agencia Xinhua.
Únicamente aceptará enfermos de neumonía viral de origen desconocido, que contaminó desde diciembre a 830 personas, de las que han muerto 26, según el último balance.
El lugar «aliviará la escasez de recursos médicos», precisó la agencia de prensa oficial.
Por otro lado, el mercado de mariscos de Wuhan, en la provincia de Hubei, con el que se vincula el origen del brote en humanos del nuevo coronavirus, ya que muchos pacientes eran vendedores o clientes habituales de este lugar, vendía distintas especies de animales salvajes, desde cachorros del lobo y ratas hasta serpientes.
La agencia France Presse cita los datos de vendedores y medios chinos.
En ese sentido, el experto en virología y jefe del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de China, Gao Fu, declaró este miércoles que las autoridades creen que algunos animales salvajes vivos podrían haber sido la fuente del brote.
Distintos animales exóticos, como civetas y murciélagos, se consumen en China y otros países de Asia, donde son considerados un manjar o incluso beneficiosos para la salud, según el sentir popular.
En su día, el origen del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) o neumonía atípica que se propagó por China en 2002, fue asociado con civetas también vendidas en mercados animales salvajes.
Por su parte, dos investigaciones realizadas por científicos chinos presuponen que la nueva cepa de coronavirus se habría originado en murciélagos y transmitido a humanos a través de serpientes, según estudios publicado el 21 y 22 de enero respectivamente.
En otro orden, China anunció su intención de cerrar una sección de la Gran Muralla como medida para controlar la propagación del nuevo coronavirus.
La enfermedad ha llevado al país a cerrar una serie de puntos donde existe aglomeración de personas.
En la capital se han cancelado todas las ceremonias del Año Nuevo chino y los principales eventos públicos.
La medida incluye las ferias que se llevan a cabo durante estas festividades e incluso los cines han suspendido sus estrenos.