Con su designación, Chiarella pasa a ocupar uno de los cargos más importantes dentro del centenario partido, en una etapa marcada por reconfiguraciones internas y desafíos políticos hacia adelante.
El dirigente del sur santafesino continuará ejerciendo su función como intendente de Venado Tuerto, mientras asume al mismo tiempo la conducción del radicalismo nacional.
La elección contó con la participación de representantes de distintas provincias, que avalaron la propuesta de un recambio generacional dentro del partido.
Desde el entorno del flamante presidente señalaron que uno de los objetivos de la nueva conducción será fortalecer la estructura partidaria y articular con dirigentes territoriales en todo el país.
La UCR, uno de los partidos históricos de la Argentina, renueva así su conducción a nivel nacional, con la presencia destacada de un dirigente del sur santafesino.