En su proyecto, Castellani propone la implementación de un sistema desarrollado por el CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) para reducir la concentración de estas sustancias en el agua, especialmente en aquellas zonas donde la población se ve más vulnerable a sus efectos nocivos para la salud.
La iniciativa surgió a partir de la preocupación de la diputada por la calidad del agua en varias localidades santafesinas, donde el arsénico y los nitratos representan una amenaza para la salud de los habitantes, especialmente en áreas rurales. El arsénico, en particular, ha sido asociado con varios problemas de salud graves, incluyendo cáncer, enfermedades cardiovasculares y daño a órganos vitales.
El sistema propuesto por Castellani se basa en tecnologías desarrolladas por el CONICET que permitirían tratar el agua de manera eficiente, reduciendo los niveles de estas sustancias y garantizando el acceso a agua potable de calidad para miles de santafesinos.