Se denomina “descacharrado” a la acción de eliminar cuanto cacharro o depósito de agua haya en los patios de las casas, y en su interior, con el fin de reducir al mínimo los posibles criaderos de mosquitos y de terminar con los huevos que pudieron haber quedado depositados en esos recipientes, en la temporada anterior.
Esta acción implica lograr tener el “patio limpio”, e incluye tener un manejo adecuado de los recipientes que van a contener agua, como eliminar aquellos en desuso.
Para ello recomendamos:
- Objetos que puedan acumular agua de lluvia (latas, botellas, envases, barriles, etc.): vaciarlos, desecharlos o ponerlos boca abajo
- Cubiertas o neumáticos: eliminarlos, agujerearlos o dejarlos bajo techo
- Tanques, bidones de almacenamiento de agua: mantenerlos herméticamente tapados con tapas o telas mosquiteras y pasar el agua de un depósito a otro, a través de una tela limpia, una vez por semana, para eliminar huevos y larvas
- Agua de floreros – Agua de consumo de animales: cambiarlas cada tres días y cepillar los bordes de estos recipientes para despegar los huevos que quedan inactivados
- Recipientes que estén en uso (baldes, jarras, carretillas, regaderas, etc.): mantenerlos sin agua y boca abajo cuando no se utilicen
- Techos y canaletas de las viviendas: mantenerlos limpios para evitar estancamiento de agua.
- Macetas u objetos en desuso que no puedan eliminarse: hacerles agujeros para que drene el agua.