Hugo Santillán se desmayó este sábado a la noche cuando escuchaba el fallo de la competencia con el uruguayo Eduardo Abreu. Permanecía en un hospital de la ciudad bonaerense de San Nicolás con traumatismo de cráneo.
El boxeador santafesino Hugo Santillán se desvaneció este sábado a la noche cuando escuchaba el fallo de la pelea que empató con el uruguayo Eduardo Abreu y quedó internado en grave estado en un hospital de la ciudad bonaerense de San Nicolás, a causa de un severo traumatismo de cráneo.
Santillán, de 23 años y oriundo de la localidad de Ceres, no llegó a escuchar completo el veredicto de los jurados, quienes resolvieron dar empate en decisión dividida. Mientras se daba lectura al fallo, Santillán se desmayó yle tuvieron que aplicar oxígeno en el mismo cuadrilátero del gimnasio del club San Nicolás, escenario de la velada.
El púgil fue trasladado de inmediato al Hospital San Felipe, donde fue alojado en la sala de terapia intensiva, con «un fuerte traumatismo de cráneo».
«El paciente entró entubado y en las próximas horas será sometido a diversos exámenes. Tiene pronóstico reservado», confió una fuente médica del centro asistencial bonaerense a la señal TyC Sports.
Más tarde, el doctor Marcelo Arburúa, profesional que atendió al púgil durante las primeras horas posteriores al desvanecimiento, explicó a la agencia Télam que «el paciente ingresó con pérdida de conocimiento, sin recuperarse, y con traumatismo de cráneo«.
«Se realizarán estudios tras compensarlo para evaluar la gravedad de una probable lesión intracraneana«, agregó.
El pleito fue dominado nítidamente por el boxeador montevideano, de 30 años, que impuso la mayor potencia de sus manos, pese a lo cual dos de los jurados dieron empate en 95.
Abreu (61,200 kilogramos) defendió con éxito la corona Latino Plata de categoría Ligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) ante un Santillán (60), que tenía suspendida la licencia hasta el próximo martes 30 del corriente, por decisión de la Federación Alemana, tras la derrota que sufrió en junio pasado con el armenio-germano Artem Harutyunyan, en Hamburgo.