Lo cobrarán los estatales provinciales en dos veces, la primera antes de las fiestas. Los gremios no lo vieron del todo mal.
El gobierno provincial formalizó ayer, a través de los ministros de Gobierno y Reforma del Estado, Pablo Farías, y de Economía, Gonzalo Saglione, el valor del bono de fin de año que ofrece pagar a los empleados estatales activos y pasivos: 3.000 pesos para los sueldos de hasta 20 mil nominales; 2.500 para los sueldos de hasta 30 mil y 2.000 para quienes perciben hasta 50 mil de sueldo nominal. Serán liquidados en dos veces: en diciembre para las fiestas, y en enero. Para los pasivos el bono será de 1000 pesos y a los pensionados de 750 pesos, pagaderos de una sola vez para las fiestas. A excepción de los docentes, los gremios ayer no vieron el anuncio con malos ojos.
«Si fue una sobreactuación en la que cada uno jugó un rol prefijado tan mal no les salió, ya que instalaron un parámetro», especuló ayer un legislador opositor en referencia al cruce que habían tenido el vicegobernador, Carlos Fascendini, y el gobernador, Miguel Lifschitz, en la jornada previa a este ofrecimiento.
Es que el vice había resaltado que el suplemento salarial sería de 2.000 pesos, porque se basaba en lo ofrecido por una provincia parecida a Santa Fe como es Córdoba (2.000 para sueldos más altos y 1.500 para los más bajos). Lifschitz lo había desautorizado. Ayer, finalmente, se supo que el valor del bono es más alto que el de la vecina provincia, pero está muy por debajo de los 5.000 pesos solicitados por la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), el gremio estatal más numeroso en afiliados.
Respuesta. Ayer, el titular de UPCN, Jorge Molina, no vio con malos ojos el bono navideño santafesino. «Si vemos el contexto nacional por un lado, y lo que ayer decía el vicegobernador Fascendini, que proponía tomar como referencia a Córdoba y su bono de 2.000 pesos para los que ganan hasta 30 mil, esta propuesta, que nunca es suficiente, es superior a todas», remarcó.
Cuando los periodistas le preguntaron si la oferta se pondría a consideración de su asamblea de afiliados o simplemente la informarían, aclaró: «Esto es un anuncio del gobierno, nosotros lo vamos a comunicar. Esto no es una reunión paritaria que está sujeta al diálogo o la aprobación de los compañeros. Vamos a ir y comunicar. En nuestro caso este bono viene a satisfacer el reclamo que venimos planteando desde octubre».
Molina detalló además que durante la reunión con los ministros su gremio reclamó que los jubilados también tuvieran una segunda cuota del bono en enero (no contemplada en la oferta oficializada ayer), y que la paritaria pública se reúna en enero para comenzar a discutir salarios.
Por su parte, el secretario adjunto de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Marcelo Delfor, subrayó que lo que se vivió ayer fue «un anuncio del Ejecutivo y no un ofrecimiento. Seguimos insistiendo en que se reabra la paritaria, porque es el ámbito donde se discuten salarios. Nosotros no vinimos a discutir una recomposición salarial sino a ser informados de una decisión del Poder Ejecutivo de otorgar una suma adicional».
No obstante, dejó entrever que ATE también veía con buenos ojos el bono navideño que presentó el gobierno provincial.
Ambos gremialistas puntualizaron ayer que al tratarse el bono de una suma fija, extraordinaria, no bonificable ni remunerativa, que no genera integra el salario ni genera aportes, «es clave que en enero se reúna la paritaria para discutir los salarios con toda la anualidad por delante».