De esta manera, destacaron la necesidad de que llegue una lluvia a la región.
En el caso del trigo, el último informe también destacó el impacto que habría si la situación pluvial no se modifica. Aseguraron que se podría dar una merma importante en el rendimiento
“Sin aportes extra desde el Pacífico y el sur de Brasil, será imperioso que mejoren los mecanismos regionales a fines de septiembre”, explicaron el doctor en Ciencias Atmosféricas, José Luis Aiello, y el consultor, Alfredo Elorriaga. En este sentido, agregaron que hay posibilidades de lluvias entre el martes 28 y el miércoles 29.
Por el momento, se prevén fenómenos muy puntuales, aislados y de escaso volumen. “La tercera semana de septiembre mostró un significativo cambio en el comportamiento de la distribución territorial de las precipitaciones”, comentó Aiello.
Además, Elorriaga y Aiello coincidieron que, sin aportes extra desde el Pacífico y el sur de Brasil, será imperioso que mejoren los mecanismos regionales a fines de septiembre para que haya una mejora. “Cada semana se agrava la falta de agua en el centro de la región núcleo y el norte de Córdoba y Santa Fe, junto al norte del país”, destacaron desde GEA.
Maíz
Se sembró el 55 %, pero la falta de agua pone en dudas el futuro de la siembra, señalaron desde la Bolsa de Comercio de Rosario. En este sentido, explicaron que el aumento de la desecación superficial del suelo pone en riesgo la concreción de los planes de siembra en el sudeste cordobés, norte bonaerense y sur de Santa Fe.
Por su parte, en Marcos Juárez, Córdoba, la falta de agua interrumpió las siembras, habiendo avanzado un 75%. “De no tener una lluvia pronto, quedará un 20 % de la superficie planificada sin sembrar”, advierten los técnicos.
Trigo
La falta de agua no es ajena al trigo si no se revierte la situación. “Sobre el sudeste cordobés se necesitan entre 100 y 120 mm para alcanzar niveles óptimos de humedad. En Santa Fe se necesitarían alrededor de 60 a 80 mm”, destacó el informe de GEA.
Por otra parte, la BCR aclaró que, con el avance del trigo hacia las etapas más críticas, los técnicos señalan que es esencial una nueva lluvia y que no se produzcan heladas tardías para que el cultivo exprese todo su potencial de rinde. Los lotes mantienen un buen estado: un 5% está en excelentes condiciones, un 80% muy bueno y el resto bueno.
El frío, la otra preocupación. “El trigo entra en etapas más susceptibles a las bajas temperaturas. El 55% de los lotes está en encañazón, 25% despliega la hoja bandera y un 15% tiene la espiga embuchada”, destacó la BCR. El regreso del frío podría generar un impacto en los trigos maduros.
Fuente: Agrofy News