Al cumplirse nueve años de la muerte de Juan Pablo II, en el Vaticano ya está todo listo para convertirlo en santo en tiempo récord, en una ceremonia histórica y multitudinaria que se realizará el próximo 27 de abril y en la que también será canonizado otro papa, Juan XXIII.
Será un acontecimiento inédito porque dos pontífices -Francisco y probablemente Benedicto XVI, que ya fue invitado- serán parte de la ceremonia de canonización conjunta de dos papas fallecidos, algo nunca visto en la historia de la Iglesia.
Luego de conducir a la Iglesia católica durante 26 años, el papa polaco Karol Wojtyla murió a los 84 años un 2 de abril de 2005 en su habitación privada del Vaticano, tras dos días de agonía y con una salud muy deteriorada.
La multitud de fieles llegados de todo el mundo que recibió en la plaza San Pedro la triste noticia de su muerte se convirtió inmediatamente en la protagonista de una aclamación popular.
«Santo súbito» (Santo ya) fue la expresión que resonó en el Vaticano durante días después del fallecimiento del «papa viajero», el mismo que jugó un papel decisivo para poner fin al comunismo en su Polonia natal, que mejoró las relaciones con otras religiones y medió para detener un conflicto armado entre Argentina y Chile por el canal del Beagle.
Será un acontecimiento inédito porque dos pontífices -Francisco y probablemente Benedicto XVI, que ya fue invitado- serán parte de la ceremonia de canonización conjunta de dos papas fallecidos Si bien siguió todos los pasos marcados por la Iglesia, la canonización de Juan Pablo II llega en tiempo récord, y fue facilitada por el hoy papa emérito Benedicto XVI, quien retiró una norma que requería un período de espera de 5 años después de la muerte, antes de que se pudieran iniciar los trámites para convertirlo en santo.
Los milagros estudiados por el Vaticano y que llevarán al papa polaco a los altares son dos: la curación inexplicable de una monja francesa que padecía la enfermedad de Parkinson, la misma que sufrió Juan Pablo II en los últimos años de vida; y la de una mujer de Costa Rica que había sufrido una seria lesión cerebral incurable.
En cuanto a Juan XXIII, quien falleció el 3 de junio de 1963, el papa Francisco sorprendió al anunciar que lo proclamaría santo sin esperar la confirmación de un segundo milagro.
De esta manera, el papa polaco y Roncalli se convertirán en los otros dos pontífices proclamados santos en los últimos cien años junto con Pío X, que fue canonizado el 3 de septiembre de 1954.
En la ciudad de Roma habrá un despliegue sin precedentes para la ceremonia del domingo 27 de abril, ya que cientos de miles de peregrinos de todo el mundo llegarán para participar de las celebraciones.
Las autoridades municipales anunciaron hoy, por ejemplo, que el servicio de subterráneos estará abierto las 24 horas y que se instalarán pantallas gigantes en los foros imperiales y en las plazas de la ciudad para seguir los actos.
Otra actividad que planea el Vaticano es la denominada «Noche blanca», prevista para el sábado 26 de abril, donde once iglesias permanecerán abiertas durante la noche para celebrar una vigilia de oración, lecturas del Evangelio y textos de ambos pontífices y meditaciones.
Esta semana, el Vaticano anunció además la creación de una plataforma digital -que incluye una página de Internet y una aplicación para teléfonos móviles y tabletas- para que los fieles en todo el planeta puedan seguir las alternativas de la ceremonia.
El portal oficial del evento será (www.2papisanti.org), que estará disponible en cinco idiomas (italiano, inglés, francés, español y polaco) y en el que se encontrarán noticias, eventos y otras informaciones, junto con material biográfico, vídeo y fotográfico de los papas que serán santos.
También se anunció que en un museo de Cracovia se exhibirá la pistola usada en el atentado contra Juan Pablo II el 13 de mayo de 1981 en la Plaza San Pedro, como una «muestra de que Dios protegió» al papa polaco.
Fuente: Télam